Hola amigos, bienvenidos a mi blog nuevamente y por supuesto que vamos a referirnos al clásico número 189 en la historia del futbol ecuatoriano. Que podría quedar grabado en la mente de todos los emelecistas, ya que desde 1982, hace 28 años que no están por encima de su clásico rival con más victorias, y hoy los encuentra empatados con 58 cada uno.
Un clásico diferente? No tanto, todos los clásicos son un partido especial, un partido diferente, que se vive con intensidad, por ambas hinchadas, por la prensa en general, y sobre todo, por quienes son parte de ambas instituciones, independientemente de cómo vengan en la tabla de posiciones, y en donde normalmente no existen favoritismos. Claro, lo ideal en fútbol es tener buenas individualidades, sumado a un gran funcionamiento colectivo, sentirse con la tranquilidad, ya, de estar en la final del torneo de donde saldrá el monarca 2010, y jugar en su hábitat natural. Es el caso de Emelec que esta como pez en el agua en esta recta final de temporada, y si bien viene de perder en el estadio Capwell frente al Deportivo Cuenca, este resultado fue un mero accidente, para un equipo que nunca renuncia a su espíritu ofensivo, ni al vértigo que le da a su juego de ataque.
Del otro lado estará Barcelona, un equipo que hace 8 partidos que no gana, que perdió 6 cotejos en seguidilla, que viene de problema en problema, de cuestionamiento en cuestionamiento, de futbolistas que están pensando más en terminar la temporada para respirar tranquilos, que en comportarse como profesionales comprometidos con la ambición de dar pelea hasta el final...de un cuerpo técnico que no sabe cómo empezar a armar este rompecabezas que le dejaron, y que vive una de las últimas jugadas de ajedrez de su principal, que consistió en la designación como presidente de la comisión de futbol al Alfonso Harb, que nunca termino de irse del todo, que siempre desea estar ahí, y que lo primero que hizo, fue realizar declaraciones desubicadas, primero en contra de su rival deportivo y después en contra del árbitro del encuentro, el sr Omar Ponce, acusándolo de emelecista. Cual fue la real intención solo lo saben, él y su entorno, pero no hay excusas, “ni encender" el clásico para que vaya mas gente, ni quitarle presión "a sus muchachos" que de muchachos no tienen nada, y además ganan fortunas por hacer lo que les gusta…
Más allá del resultado que arroje este próximo clásico, sobre todo porque lo que necesita este equipo es un salto de calidad, un baño de jeraquia, como lo tuvo hace más de 10 años atrás cuando se lo mencionaba como un coloso de Sudamérica...en fin...! Se viene un clásico mas, ojalá tenga el marco que la grandeza de ambas instituciones y sus historias merecen, los puntos en juego son muy importantes, pero más relevante aun, es la inyección anímica que representa ganar este tipo de partidos...Emelec quiere quitarle a Bsc todos los sueños de Libertadores, y los toreros, además de tomar oxigeno, sumir a su hermano de patio en la más profundas de las depresiones, inclusive que lo lleven a dudar de sus reales posibilidades de Campeonar...que pasara??
Alfaro Moreno